El tenis sudamericano celebra. El brasileño Joao Fonseca confirmó que su irrupción en el circuito profesional no es casualidad y este domingo conquistó el ATP 500 de Basilea, al derrotar con autoridad al español Alejandro Davidovich Fokina por 6-3 y 6-4, en apenas 1 hora y 25 minutos de juego.
Con tan solo 19 años, el carioca exhibió una madurez competitiva notable, respaldada en 29 tiros ganadores, 19 errores no forzados y un rendimiento impecable al servicio, cediendo solo una rotura en todo el partido. El triunfo le permitió cerrar una semana de ensueño en la tierra de su ídolo, Roger Federer, y hacerlo con un tenis audaz, sólido y emocionalmente equilibrado.
Fonseca había llegado a la final tras vencer en sets corridos a Giovanni Mpetshi Perricard (33°) y Jaume Munar (42°), además de avanzar por los retiros de Jakub Mensik (19°) y Denis Shapovalov (23°). Pero fue en el partido decisivo donde mostró su mejor versión ante un Davidovich Fokina que continúa sin poder romper su maleficio en finales del circuito.
Con esta consagración, el ex número uno mundial junior se convierte en el segundo campeón más joven en la historia del torneo, solo superado por Jim Courier en 1989, y en el primer brasileño en ganar un ATP 500 desde que Gustavo Kuerten lo hiciera en Cincinnati 2001.
Fonseca, quien ya había levantado el título de las Next Gen ATP Finals 2024 y del ATP 250 de Buenos Aires 2025, asciende 18 posiciones en el ranking, alcanzando el puesto 28 del mundo, la mejor ubicación de su carrera.
Un paso gigante para una de las joyas más prometedoras del tenis latinoamericano, que parece destinada a escribir capítulos memorables en la nueva era del circuito.
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