De Marketa Vondrousova a Barbora Krejcikova. La tradicional y exquisita técnicamente escuela checa sigue reinando en Wimbledon. Sorprendió la primera siendo la mejor de 2023, tomó el relevo su compatriota también cuando menos se esperaba que pudiera hacerlo. Lo de Krejcikova (32° WTA) es un regreso triunfal, la vuelta a la gloria del Grand Slam.
Este sábado, la checa derrotó a la italiana Jasmine Paolini (7°) por 6-2, 2-6 y 6-4 y se consagró en el All England.
Tras un segundo set inestable, Krejcikova recuperó la compostura y jugó un último set casi impecable.
Después de que Paolini se defendiera de dos puntos de partido, Krejcikova conectó un saque profundo e imposible de devolver y levantó los brazos tras un hora y 56 minutos de juego.
Cuando está sana, la checa demostró que encuentra la manera de ganar. Hasta ahora ha ganado nada menos que 12 de 13 finales importantes: 2-0 en individuales, 7 de 8 en doble femenino y 3-0 en doble mixto. Además, ganó medalla de oro en doble en Tokio 2020+1.
Krejcikova es la cuarta jugadora checa que gana el título femenino en Wimbledon en la Era Abierta después de Jana Novotna, Petra Kvitova y la campeona del año pasado Marketa Vondrousova.

Hace tres años, en Roland Garros, Krecikova se había consagrado sobre la arcilla. Ahora en césped, festejó a lo grande.
Tras Vondrousova, Krejcikova. Antes triunfaron Petra Kvitova y Jana Novotna. En el Royal Box de la central del All England Club, la checa más laureada, aunque bajo bandera estadounidense tras dejar clandestinamente una Checoslovaquia sepultada por el telón de acero, Martina Navratilova.
“No tengo palabras, es increíble que haya pasado. Es el mejor día de mi carrera y de mi vida”, significó la jugadora nacida en la ciudad de Brno, que tenía dos coronas de Wimbledon en dobles, especialidad en la que atesora siete Grand Slams y un oro olímpico. Además de haber sido la número 1.
📸: Joel Marklund / AELTC